¡Hola Spaneasiers!, bienvenidos a un nuevo post. Esta vez les toca el turno a los conectores. ¿Cuántas veces has intentado conectar ideas en un texto en español y, simplemente, parecía que no encajaban? Es innegable que realizar textos correctamente conectados es una tarea ardua, incluso para algunos nativos en su propia lengua.
La clave para hilar nuestras ideas de forma correcta se encuentra en dos aspectos íntimamente relacionados: la organización de nuestro texto y los conectores. ¡Vamos allá!
Cuando nos disponemos a redactar un texto es muy importante tener en cuenta qué queremos hacer. Quizá estamos escribiendo un post para una página web, un pequeño ensayo para nuestra clase o la descripción de una breve experiencia en nuestro currículum. En cada uno de estos casos la estructura cambiará, sin embargo, dado el propósito de este post pensaremos en un pequeño texto para nuestra clase.
Conviene, antes de comenzar a escribir, realizar un pequeño esquema en el que, de manera general, dividiremos el texto en tres partes: una introducción, donde explicaremos brevemente de qué vamos a hablar y por qué vamos a hablar de ello; la segunda parte es la más importante, aquí vamos a desarrollar nuestro discurso, si se trata de una argumentación daremos las razones a favor o en contra del tema propuesta en la introducción, o si tenemos que contar nuestras vacaciones desarrollaremos aquí los acontecimientos; por último, llevaremos a cabo la conclusión en la que expondremos, de manera breve, lo que queremos que se extraiga de todo lo anteriormente escrito.
Debemos tener en cuenta (y para todos aquellos que queráis realizar el DELE esto es importante) dos aspectos fundamentales: la coherencia, es decir, si nuestro texto tiene sentido; y la cohesión, para lo cual será necesario estructurar las ideas en orden utilizando, entre otros recursos, conectores.
El español tiene dos mecanismos de estructuración bien diferenciados: la subordinación y la coordinación. En el primero de estos mecanismos introducimos una oración dentro de otra cumpliendo (la oración insertada) un papel dentro de la oración que la contiene:
-Esas son los juegos que quiero por mi cumpleaños.
-Madrid es donde nació Cervantes.
Como vemos las frases subrayadas no tienen sentido por sí solas porque no pueden funcionar independientemente. En las coordinadas, en cambio, encontramos dos frases que se unen pero manteniendo la independencia la una de la otra.
-O vamos a Madrid o perdemos el dinero.
–Fui a la casa pero no había nadie y me fui.
Como vemos en ambos ejemplos hay frases que funcionan independientemente. En la segunda parte de este post veremos, con más detenimiento, los diferentes tipos de conectores ¡Hasta pronto Spaneasiers!